Sobre Constitución, Estatut y boleros

Un lector de este hiperminoritario blog, llamado MDD, me escribe que no "dicte" o, dicho con otras palabras, que no hable de política. Y yo, sinceramente, no tengo la impresión de hablar de política.

Le responderé con algo que ha pasado hoy, día posterior a la aprobación del Estatut en las Cortes Catalanas. El líder del nacionalismo catalán conservador, Artur Mas, ha dicho que el síntoma que muestra que el Estatut ha sido un acierto es que Chaves, el presidente andaluz, Manuel Chaves, se opone al mismo. No es ya Ibarra, Simancas y todos estos, ha dicho Mas, sino Chaves. Es decir, el Sur, la otra frontera. Que Andalucía, paradigma de la lejanía a Europa y al progreso durante los siglos XIX y XX, acuse el alejamiento de Cataluña, es síntoma inequívoco de que han acertado: Cataluña se aleja de Andalucía, de Marruecos= de España.

Artur Mas ha puesto este blog en el Sur, donde siempre estuvo, de donde siempre quiso salir, pero no pudo, remitiéndose siempre a un exilio confuso y onírico. Podría contestar a mi amigo MDD con un lugar tan común como el de que lo que es malo para Andalucía es bueno para Cataluña, un lugar tan común en forma de verso conocido:

"Primero fueron a por los comunistas, pero yo no dije nada pq no era comunista. Despues fueron a por los socialistas, pero yo no dije nada pq yo no era socialista. Entonces fueron a por los sindicalistas, pero yo no dije nada pq no era sindicalista. Mas tarde fueron a por los Judios, pero yo no dije nada pq no era judío. Finalmente vinieron a por mi, pero ya no quedaba nadie para decir nada."

Pero lo haré diciendo otra cosa:

¿Porque no una webblog escondida, sin pretensiones de dictar, de ejercer cátedra, de normativizar, de gritar? ¿Porque no una webblog invisible, perezosa y ritmo de bolero que no pretenda nada más que sumergirse en el mundo de pasadizos, goteras, ficciones y erizos que el autor debe poseer? Me decía el anónimo.

Porque al autor, otros políticos metidos a poetas, otros estatuts metidos a boleros, lo han convertido en algo que, a veces, no quiere ser. Porque cuando queríamos dejar de ser españoles, cuando queríamos entrar en el mundo de los pasadizos y las goteras, de las ficciones y los erizos, otros autores nos sacaron de ahí, con la maza del tiempo y la patria, y nos re-patriaron de nuestro onírico exilio.

Seguiremos soñando con poder soñar y olvidar.